En esta mi primera entrada “de
verdad” quiero tratar un tema muy recurrente en estos tiempos, la Eficiencia Energética en los edificios.
Me gustaría plantear este tema dejando
una pregunta en el aire, ¿En qué pensamos cuando oímos “código de circulación”
ó Guardia Civil de Tráfico?...
Parece difícil comenzar un
artículo sobre eficiencia sin citar como desencadenante la temida, la terrible,
“ella”, si, la crisis. Es como si la eficiencia solo tenga sentido en un mundo
en depresión y sería inconcebible en otra situación económica. Hablo en este
momento de Eficiencia a secas, tanto energética, como económica, de proceso…
etc. Desconozco si es solo en España, pero me encaja perfectamente… España es un país donde cuando
las cosas van bien se apoya aquello de “pa' que tocarlas”, y como no las
tocamos cuando van bien, pues nos toca arreglarlas cuando van mal, juntándose el
hambre con las ganas de comer. Evidentemente muy bien no van cuando se dirigen
hacia ir mal en vez de hacia ir mejor… Pero eso cuando ganamos dinero a fin de
mes pues importa poco. Aunque mejorando la eficiencia podríamos ganar más e ir
hacia mejor, explícaselo tu. Como veis traduzco directamente el “bien” / “mal”
por “gano dinero” / “pierdo dinero”. Esto me lleva a retomar mi pregunta
inicial, la de la Guardia Civil de Tráfico, y sí, la respuesta es MULTA,
pensamos en multa, en dinero, o como diría Pocoyo simplificando, en MAL. Lo
traducimos todo a dinero, somos así, egoístas, avariciosos, rácanos, tacaños,
no sé, pero nada nos molesta lo suficiente hasta que nos toca el monedero, entonces sí, y duele.